ATE y municipio fueron a un cuarto intermedio por los despidos


Luego de fracasar las primeras dos reuniones, el intendente de Sierra Grande Renzo Tamburrini acudió el viernes a la conciliación con ATE convocada por la Secretaría de Trabajo en Viedma, y se negó a reincorporar a las trabajadoras despedidas.

“Las trabajadoras despedidas en Sierra Grande tenían hasta cinco años de contrato y tres años de beca. Es decir, realizaban tareas de personal de planta con contratos más precarios. Tienen que ser restablecidas en su trabajo”, señaló Alicia Huencho, secretaria general de ATE en Sierra Grande.

La conciliación llegó tras una protesta de ATE con corte de la Ruta Nacional 3 y el bloqueo de acceso a Playas Doradas. El sindicato advirtió que podría volver a las calles si no hay una respuesta a su demanda. Ante la falta de acuerdo, las partes coincidieron en un cuarto intermedio hasta el jueves 11 de marzo a las 17.

En lo que sí hubo acuerdo, fue en fijar fecha en abril para iniciar un proceso de pase a planta permanente. ATE valoró, por otro lado, la convocatoria a negociar salario en marzo.