El intendente de Sierra Grande cuestionó el pago a “sectores que no revisten mayores necesidades” y lo focalizó en los legisladores, “como Roxana Fernández”, una de sus rivales en los comicios de octubre.
El intendente de Sierra Grande Renzo Tamburrini criticó a los legisladores provinciales por el cobro del bono de 60.000 pesos, focalizó el reclamo en Roxana Fernádez y recordó que una vez que se conoció la medida pidió asistencia financiera de la provincia para afrontar el pago a los municipales serranos sin lograr una respuesta hasta el momento.
«No revisten mayores necesidades» dijo sobre los integrantes del parlamento rionegrino y sostuvo que en el caso de Sierra Grande «hay un contrapunto obsceno cuando vemos que una legisladora como Roxana Fernández, cobra un abultado salario y además recibe un bono, lo que resulta casi ofensivo para los trabajadores municipales que cobran sueldos magros y que a pesar de las negociaciones permanentes que tenemos con los representantes de los trabajadores, no logramos equiparar los sueldos con las demandas y el costo de vida».
El jefe comunal agregó que «es monumental la falta de empatía con quienes sufren día a día las consecuencias de la situación económica».
La referencia a Fernández tiene que ver con la contienda electoral del 22 de octubre donde ambos son candidatos en el municpio de Sierra Grande.
Tamburrini recordó que días antes del anuncio del Gobierno Nacional el municipio «logró acordar en paritarias, el salario para los próximos meses. Esto implica que los escasos recursos municipales ya están comprometidos con los empleados».
«Los trabajadores de la Municipalidad también merecen y necesitan cobrar ese beneficio. No podemos afrontarlo desde las arcas municipales, por eso es que le pedimos a quienes hoy representan al gobierno de la provincia de Río Negro tener un acercamiento a la realidad de quienes verdaderamente lo necesitan» enfatizó.
