Ocurrió este viernes (26/6) durante la comisión virtual de Presupuesto y Hacienda de la Legislatura de Río Negro.
La cuarentena de COVID-19 mostró algo muy claro: las nuevas tecnologías de la comunicación son muy buenas para muchas cosas… y un peligro para otras.
Este viernes por la mañana, la legisladora de Juntos Somos Río Negro (JSRN), Roxana Fernández, conoció el lado oscuro de las plataformas de videoconferencias: se olvidó que el micrófono estaba abierto y dijo algo que -es probable- va a tener un alto precio: “…lo que pasa es que Arabela está haciendo muchas cagadas”, disparó hablando con alguien que no fue captado por la cámara.
Después de lanzar su frase al aire, Fernández hizo un gesto que ratificó su propio “desatino”: con un suspiro de sorpresa se tapó la boca.
Inmediatamente, el legislador oficialista, Carlos Johnston, pidió cerrar el micrófono. Y el tema quedó ahí. Hasta que comenzó a circular en las redes.